miércoles, 26 de octubre de 2011

¿Qué esconde una piedra?, Oro

-¿Lucía Díaz?

-Sí, yo

-Pase,  por favor.

Dos días más tarde.

Juan, fue un gran amigo, alguien en que se podía confiar y una buena persona amado por alguna que otra gente, ahora descansará en paz...

Y otros dos días

-¿Juan Belver?

-Sí, dime

-viene a visitarte una tal Lucía Díaz

-Que pase

Porque todo lo malo que desees a alguien, recae sobre ti igual.

Pero eso sería una versión un tanto desagradable, estrambótica y un tanto especial.
Todo tiene su encanto bueno y su encanto... malo, tan bueno es lo bueno como lo malo, la manera más perfecta de poder cualificar a la persona tal y como es.
Pienso que hay que ser desigual para que sea una manera de aceptar lo errores

Tiene poca paciencia, (y una manera de hacer una comparación distorsionada sería con un oso perezoso para coger su comida)

Lucía sería de las personas que jugando con un video juego y teniendo tres vidas solamente querría una
Lo cual es una filosofía de vida que me atrae, lo tomaría como para un estudio.

Pero hay algo muy especial para mí que quiero contar, pues esta chica llamada Lucía, ha sido de momento el único organismo capaz de soñar jugando mi vida y que llegue a comprender la filosofía del sueño.

Un afán por quitarme mis complementos, realmente increíble, como abeja  por flor.

Y me ha enseñado que tiene mucha esperanza, cosa que me ha dejado... como decirlo ¿así? :O

En fin llegando a una conclusión enrevesadamente inaudita para un acto del bien de una amiga especial y organismo perteneciente a esta población de una comunidad de la biosfera, digo que, es una amiga que sorprende, que tiene más cosas de las que se cree uno que se puede tener y que como siempre ha sido para mí o lo siempre que se pueda llegar a decir, es una amiga muy especial para mí.

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